Pintura plástica a base de agua que proporciona un acabado satinado. Gracias a su alto poder cubriente, basta una sola capa para obtener un resultado óptimo. Se aplica fácilmente sobre cualquier superficie, tanto en utensilios como en muebles y ropa, con la ayuda de todo tipo de instrumentos (pinceles, brochas, esponjas, etc.). Una vez seca es muy resistente y totalmente inocua para el niño. Colores vivos y luminosos que pueden mezclarse entre sí para conseguir un sinfín de tonos.